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20 noviembre 2008

Invertir en residuos en Latinoamérica

El cambio climático es un hecho, por mucha oposición que haya hacia la toma de medidas efectivas, lo cierto es que son cientos las evidencias científicas que corroboran lo que está pasando. Ante estos hechos, ya hemos visto en otro artículo que se está organizando todo un negocio dirigido a cambiar la actual tendencia de perturbación en el clima. Se abren inmejorables oportunidades para explorar nuevos nichos de mercado por inversores y para poner en práctica nuevas tendencias de ingeniería. En este artículo vamos a centrarnos en analizar con cierto detalle un fenómeno sin precedentes que está ocurriendo en América Latina, y que abre oportunidades de negocio para quienes lo sepan aprovechar, la acumulación de residuos sólidos urbanos. En este artículo vamos a hablar de un gran problema que también es una oportunidad de inversión, vamos a dar datos cuantitativos que permitan valorar las cifras de las que estamos hablando.
El fenómeno
América Latina y el Caribe (LAC) contaban en 1950 con un 61 % de la población en áreas urbanas, en 2001 con un 78 % y en 2015 con un 80 %. La concentración de millones de personas en áreas reducidas es ya un hecho imparable. 19,37 millones en México D.F., 18,59 en Sao Paulo, 13,52 en Buenos Aires, 11,30 en Río de Janeiro, 8,58 en Lima, 7,27 en Bogotá, etc. Tales concentraciones de personas generan ingentes cantidades de residuos domésticos, comerciales, industrias, instituciones y mercados, además del procedente de la limpieza de áreas públicas. La preocupación por la gestión de los residuos en la región ha ido más allá de la esfera local y nacional, pues el problema ya empezó a tratarse en la Conferencia de la O.N.U. en Río, 1992, y actualmente está en pleno debate en acciones como la lucha contra el cambio climático. Más específicamente, a nivel nacional, se están empezando a crear el marco legal para el sector de los residuos, así como el marco de desarrollo de políticas públicas y la creación de planes nacionales de gestión de residuos. El problema es insostenible pues se ha convertido ya en un problema sanitario de primer orden. “In most cities in the South, between a third and half of all solid wastes generated within urban center remains uncollected and such wastes generally accumulate on open spaces, wasteland and street and bring with them serious health and environmental problems.” UN Habitat Lo peor es que pese a las grandes superficies que ocupan los países de LAC, los actuales modelos económicos estimulan la concentración creciente en las ciudades. Los residuos se acumulan en espacios abiertos, y ello ocasiona serios problemas sanitarios y ambientales. Argentina, por ejemplo, cuenta actualmente con un 90 % de su población viviendo en las ciudades, con grandes metrópolis que dificultan la gestión de los residuos.
Marco legal
En todos los países, la responsabilidad en la gestión de los residuos sólidos urbanos es municipal, cubriendo tareas como la regulación, financiación, administración y operación de los servicios. A este nivel surgen las debilidades del sistema, pues la gestión de residuos no está soportada por recursos que permitan realizar el trabajo eficientemente. También hay limitaciones de tipo técnico. Sin embargo, en los últimos años ha habido cambios positivos. Una creciente participación de las administraciones públicas, y están apoyando financieramente al sistema. También las ONGs están teniendo un papel destacado al sostener programas de microempresa y participación ciudadana, y la creación de cooperativas para gestionar los residuos sólidos urbanos. Algunas asociaciones profesionales están también empezando a emerger. En este punto merece la pena reseñar la labor de asociaciones como AIDIS, DIRSA, e ISWA, cuyas regionales operan desde sus oficinas centrales en Sao Paulo. A nivel nacional, mencionamos por ejemplo la Estrategia Nacional para la Gestión Integral de los residuos Sólidos Urbanos, ENGISUR, creada por la administración argentina.
Sector privado
Hay una creciente participación del sector privado en la gestión de los residuos en la región, que se articula en torno a contratistas y concesionarios. Con este sistema se obtiene acceso a personal entrenado y a equipamiento de última tecnología.
Participación internacional
Ante un problema ambiental de tal magnitud, la Comunidad Internacional no podía permanecer indiferente. Muchas instituciones financian proyectos de gestión de residuos en la región, entre otras World Bank, PAHO/WHO (Pan American Health Organization/ World Health Organization), ECLA (Economic Commission for Latin America), USAID (United States Agency for International Development), GTZ (Deutsche Gesellschaft für Technische Zusammenarbeit) y JICA (Japan International Cooperation Agency).
Generación de residuos
Lo que caracteriza a Latinoamérica en cuanto a la generación de residuos, es que hay diferencias muy evidentes en la generación de residuos, como consecuencia de la desigual en distribución de los ingresos, y grandes diferencias se encuentran también en la generación diaria y su composición. La diferencia ocurre dentro de los países, incluso entre diferentes ciudades. A nivel global, muchos centros urbanos están desarrollados pero otros están sin desarrollar. Lationamérica genera aproximadamente 522.000 toneladas de residuos por día, un promedio de 0,90 kg/día por persona. En realidad estas cifras se calculan según lo recogido, así que en realidad el volumen es mayor. Respecto a la cobertura de recogida, alcanza al 90-95 % en los grandes núcleos urbanos y al 70-80 % en las ciudades de tamaño medio. El gran problema deriva de que tan solo el 30 % de los residuos recogidos se hace en unas condiciones sanitarias y ambientales adecuadas, y el resto va a vertederos abiertos o no controlados.
Reciclaje
Pese a los enormes beneficios del reciclaje, y la amplia aceptación por la sociedad de esta estrategia, las tasas de reciclaje en la región son tan solo del 3-5 %. Sin embargo, hay grupos de voluntarios que sistemáticamente patrullan las calles de varias ciudades latinoamericanas buscando materiales reciclables. El aparentemente bajo nivel de reciclaje en la región, bastante menor de lo esperado, puede deberse a las crisis políticas y económicas en las que se han visto implicados la mayoría de los países de la región, y que han originado falta de igualdad, pobreza y altos niveles de desempleo. Una vez que se ha recuperado la estabilidad política y económica en casi toda la región, es previsible que se inicie un proceso decidido para tratar de proteger la salud de la población, y evitar que muchos niños hagan esta tarea en condiciones infrahumanas como vienen haciendo actualmente en las periferias de grandes ciudades. La solución puede venir la creación de cooperativas que agrupen a los que recogen ahora mismo material reciclable, y transformar esa actividad en algo digno, incorporando la tecnología que haga rentable el reciclaje. Es vital sobre todo la creación en toda la región de plantas de segregación, que permitan recuperar los materiales más valiosos. Para ello es importante la cooperación del gobierno y de entidades de financiación de proyectos de reciclaje.
Tamaño del mercado
Parece ser que no hay estudios serios sobre el tamaño del mercado de los residuos en Lationamérica, pero las estimaciones (según Waste to Resource 2006 World Waste Survey, llevadas a cabo por E. Lacoste y P. Chalmin, publicadas por Cyclope) indican que, tan solo para México, Brasil y Argentina, estamos hablando de un negocio de 2.600 millones de dólares. Una ingente cantidad de dinero que se está perdiendo por incapacidad para crear el entorno adecuado para desarrollar este tipo de proyectos. Como conclusión, estamos actualmente ante una situación política y económica en los países de Lationamérica que en general ofrecen unas grandes oportunidades para el sector de los residuos sólidos urbanos. Otras fuentes:

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